Están buenísimas! Son tan finas que se deshacen en la boca! Éstas láminas están pensadas para tomarlas con un café a media tarde, o después de comer, ya que no llenan y siempre se les puede hacer un hueco. A mi me encantan las de sal Máldon, ya que el contraste dulce-salado en la boca es diferente y original. Os hace un café?
Ingredientes:
- 75 gr. chocolate negro para fundir
- 1 pellizco de sal Máldon
- 1 cucharadita de canela
Utensilios:
- 1 bol
- 4 hojas de papel vegetal
- 1 rodillo
Elaboración:
1. Cortar en trozos el chocolate y fundirlo al microondas o al baño María.
2. Verter la mitad del chocolate en una hoja de papel vegetal, y la otra mitad en otra hoja.
3. Extender el chocolate con una cuchara y espolvorear sal Máldon en una de las mitades, y canela en la otra.
4. Poner otra hoja de papel vegetal encima de cada mitad y extender el chocolate con la ayuda de un rodillo para hacer una capa bien fina, o con las manos si no tenéis rodillo.
5. Poner las láminas de chocolate con el papel vegetal en la nevera como mínimo unas 5 horas.
6. Justo antes de comer, sacarlas de la nevera, romperlas con la mano de manera irregular, y ponerlas en una bandeja.
MissObservaciones:
- Si las láminas no se dejan en la nevera el tiempo suficiente, no están crujientes y se deshacen en los dedos ya que son muy finas.
Anda que no, si el anterior estaba rico éste ya… buf para qué contarlo, hay que probarlo! lo que yo te digo, como «pop cakes»vamos a acabar todos.
Jajajajaja!! Lo bueno que tienen estas láminas de chocolate es que son muy finas, y con un poquito ya te puedes quitar el «gusanillo» de dulce! ; )